Trastornos hepáticos, biliares y pancreáticos en la embarazada

Resumen

Durante el embarazo, suceden muchas transformaciones en el cuerpo de
una mujer, las cuales ocurren por el aumento gradual de la
progesterona, se producen cambios estructurales como la alteración de
la columna, aumento en las mamas y ennegrecimiento de la panza.
Para que la gestación de un nuevo ser pueda ocurrir completamente, todos
los sistemas del cuerpo femenino están utilizados al extremo, por lo
tanto, hay una necesidad de producir glucosa para la madre y su hijo.
El peso que la madre gana en los meses, sobrecarga su musculatura y
huesos, se produce una compresión de los órganos abdominales dando
espacio al desarrollo del niño que está creciendo de manera vertiginosa;
a veces, hay un colapso de uno de estos sistemas, aislado, en cascada.
En la mayor parte, estos trastornos en el organismo se deben a que las
mujeres embarazadas no siempre cuentan con el tratamiento adecuado,
principalmente en el Paraguay, la mayoría de las embarazadas no tienen
las consultas necesarias y por esa razón sus diagnósticos también no
son realizados a tiempo para que se pueda realizar adecuadamente dicho
tratamiento desde su inicio. Cuando el riesgo es menor, estos pueden
influir o no en el proceso del embarazo, causando o no perjuicios al
niño, todos estos procesos en este momento de su vida están ligados a
sus costumbres: alimentación compatible con sus necesidades,
predisposiciones genéticas, interferencias en sus actividades diarias,
que en las fases finales del embarazo necesitan ser modificadas, el
siguiente texto demuestra las principales preocupaciones relacionadas
al embarazo: hígado, vesícula biliar y páncreas.